Un espacio virtual para compartir palabras con los alumnos del IES Ordoño II (León).


domingo, 24 de marzo de 2019

Centones en honor de Raquel Lanseros.


Con motivo de la visita a nuestro centro de la poeta Raquel Lanseros, nuestro alumnado leyó, diseccionó, comentó y, sobre todo, disfruto de una miniantología de sus poemas. Una de las propuestas de trabajo consistió en elaborar centones partiendo de su verso preferido de cada poema. Se divirtieron mucho jugando con versos y perdiéndole el respeto al oficio de poeta. Estos son algunos de los "collages" resultantes. Discúlpanos, Raquel. por apropiarnos de tus palabras.

Si alguna vez te hiere, por ejemplo,
si es verdad que el rencor 
desgasta y envejece lentamente,
no recojas el guante, te lo ruego,
ya que a veces, sin embargo,
la esclavitud se muestra soberana
ante esta fusión bendita hecha de entrañas,
los versos inflamados de poetas infinitos,
por sueños imposibles,
lo que fue y lo que era.

HUGO ALMEIDA, 4º B


Tú me miras colmado de cuanto forja el goce,
Tú eres el destilado de libertad más único,
el orgasmo espontáneo del espíritu.
Si alguna vez te hiere, por ejemplo,
mi torpeza, mi miedo o mi desidia,
perdóname amor mío.
Míralo de este modo: la vida te ha enseñado,
siguiendo su costumbre de incansable maestra,
Que no crezca jamás en mis entrañas esa calma aparente
llamada escepticismo.
Porque sé amar,
Consérvense en mis labios las canciones,
que siempre soñé que fuese un día.

LUCÍA LÓPEZ, 4º B

Por celebrar el cuerpo, tan hecho de presente,
por estirar sus márgenes y unirlos,
crea yo siempre 
en las mil infinitas posibilidades.

Porque resisto en pie, con humilde firmeza,
el rigor de este fuego que enloquece.

Porque más preciada empresa no concibo
que deshojar mi vida mereciéndote,
y cómo el alma dibuja
serenas cicatrices sobre viejas heridas,
no recojas el guante, te lo ruego,
olvida el desafío que lanza la ignorancia.

Porque incluso lo pequeño
se me ha antojado siempre un mecanismo frágil
con más de una respuesta.

Por lo que pudo haber sido,
lo que nunca será.

VICTORIA BLANCO, 4º B

Crea yo siempre en la vida.
Porque sé amar, porque probé la fruta,
porque no existe nada que perdure. 
Nos buscamos a tientas los contornos,
y el valor necesario para seguir viviendo

SARA MÚÑIZ, 4º B


Si alguna vez te hiere por ejemplo
mi torpeza,mi miedo o mi desidia,
perdóname amor mío.
Porque sé amar,porque probé la fruta,
y no maldije nunca su sabor agridulce,
tenga mi alma siempre un pellizco de ingenua.
No recojas el guante ,te lo ruego,
yo no frecuento los presos ni los jueces.
Nos buscamos a tientas los contornos,
con esa gratitud voluptuosa que provoca
la lluvia en primavera.
Lo que siempre soñé que fuese un día.

RUBÉN GUTIÉRREZ, 4º B


Huya yo del realismo encorsetado,
ya que, incluso lo pequeño se me ha antojado siempre,
un mecanismo frágil.

Yo creí encontrar la fuente del principio cuando la conocí;
la amé sin precipicios,
porque se amar,
porque probé la fruta y no maldije nunca
su sabor agridulce,
porque nos buscamos a tientas los contornos
para fundir la piel deshabitada,
 y porque más preciada empresa no concibo,
que deshojar mi vida mereciéndote.

Ahora y en el albor de toda hora,
quédate.

Lo que siempre soñé que fuese un día.

BEATRIZ MATILLA, 4º B

Porque se amar, porque probé la fruta y no maldije nunca su sabor agridulce,
porque el amor es un río con cataratas propias y remansos ajenos,
porque no existe conjunción más verdadera
que lo que siempre soñé que fuese un día.
Así que no recojas el guante, te lo ruego.
Porque, aunque de toda falta humana yo me acuso,
llore yo todavía por sueños imposibles
y por amores prohibidos.
Así que, cuando falte, buscadme entre las alas de un pájaro
 que escapa del invierno.

ALICIA SUÁREZ, 1º BACH

A veces me visita el azote de la culpa,
Lo que pudo haber sido
en este fragor mudo en el que todos somos
rufianes, vagabundos, desposeídos y presos.
Pero llore yo todavía
por sueños imposibles.
Sin red.
Sin salvavidas.
Y acumulo tan sólo
el valor necesario para seguir viviendo
con el rumor sagrado de la vida.

JOEL COQUE, 1º BACH



No hay comentarios:

Publicar un comentario

Si pretendes que las palabras que vivan en esta casa sean ofensivas, hirientes o simplemente soeces no te molestes en escribirlas: no caben en ella. ¡Ah! Y en esta humilde morada nos gusta la gente que escribe - y habla - bien. Cuídemos las palabras:son nuestra casa.